El fichaje -o la vuelta- del turco por el Pramac abre una nueva era en la fábrica japonesa mientras todavía deciden qué piloto de los actuales compartirá box con el bicampeón de SBK

Toprak celebra uno de sus triunfos en Misano.
En la semana de parón del Mundial de Motociclismo entre las citas de MotorLand Aragón y Mugello, un nombre destacó entre las motos de serie. El de Toprak Razglatioglu, al firmar el triplete en la ronda de Emilia Romagna del WorldSBK en Misano. No habían pasado muchos días desde que el turco recibiese el anuncio de su paso a MotoGP con Yamaha, y sobre la pista mostró, de nuevo, que es un piloto diferente. Recortó con Bulega (nueve puntos de diferencia) en el campeonato, y refuerza su búsqueda del tricampeonato antes del paso que marcará su futuro.

Toprak Razgatlioglu, sobre su BMW.
Un paso que se entiende como una ofensiva de Yamaha. La fábrica japonesa acumula ocho títulos mundiales desde 2004 -obra de Rossi, Lorenzo y Quartararo-, y quiere recuperar el cetro. Lo hace con sus nuevas ideas de motores, la renovación millonaria de Quartararo y el fichaje de Toprak. El piloto más destacado fuera de la órbita de MotoGP, resultados en mano. Correrá para el Pramac y la confianza es plena.
“”Tiene el talento para conseguir éxitos. Le vemos como un piloto que se adapta a motos diferentes, necesitará adaptación y no ponemos presión para que lleguen resultados rápidos. Habrá una curva de aprendizaje y creemos que tiene ese talento”, reconoce, a MotoGP, Paolo Pavesio, director general del departamento de competición tras la salida del histórico Lin Jarvis. El mensaje está claro, y más con el dirigente italiano, valedor del fichaje.
Tiene el talento para conseguir éxitos. Le vemos como un piloto que se adapta a motos diferentes, necesitará adaptación y no ponemos presión para que lleguen resultados rápidos
Una versión brutal
Pavesio, precisamente, atendió a una versión brutal del turco. En Misano no dejó ni las migas mientras pasaba por todos los escenarios posibles en carrera. Empezó ganando a Bulega en un mano a mano en la primera carrera. Fue un cañón en la cita corta y se benefició del accidente de su rival con Bassani -en la primera curva-. Y apalizó al personal en la del domingo. Toprak, en estado puro. Mientras su BMW bailaba, apoyaba en posiciones imposibles y el turco dibujaba otra actuación brutal en las motos de serie.

Toprak Razgatlioglu y Paolo Pavesio.
El mejor mensaje. Yamaha decidió recuperarle tras el nivel del turco en SuperBikes y es su nueva esperanza. “Lo llevábamos esperando un tiempo largo. Es algo natural. Empezó hace varios años su camino con Yamaha, hubo un parón, que fue muy bueno y exitoso para Toprak y nos dejó claro a nosotros que es lo que quería y nos quedó claro cuando proponer el paso a MotoGP”, explica Pavesio. Da paso a una incorporación que vira la realidad del Pramac. Pasó del título de Jorge Martín con Ducati a un curso de transición. Ahora quieren volver a esos puestos.
En ese camino también deben elegir al otro nombre. Saldrá, si nada raro pasa, de Jack Miller o Miguel Oliveira. “Es difícil tomar la decisión. Son dos pilotos que quieren tener posibilidad y tenemos que elegir sobre el que mejor potencial muestre”, añade. En el cómputo global, Miller tiene más puntos y quizá Oliveira fue el que más cerca estuvo de un buen resultado… pero se cayó en el diluvio de Le Mans.
Es difícil tomar la decisión. Son dos pilotos que quieren tener posibilidad y tenemos que elegir sobre el que mejor potencial muestre

Miller y Oliveira, con la Yamaha del Prima Pramac.
Acompañarán a un Razgatlioglu que llegará con focos y buscando la gloria. “Lo va a hacer bien, pero es un camino que se hace paso a paso. Sabemos lo que es capaz de hacer. El resultado es difícil de predecir, pero será un desafío bonito”, cierra Pavesio.