Ganó su primera carrera con el Ducati oficial, como Casey en Qatar 2007 para luego ser campeón

Marc Márquez, en Tailandia y Casey Stoner, en Qatar 2007.
El debut de Marc Márquez con el equipo Ducati oficial en el Gran Premio de Tailandia de MotoGP fue inmejorable, con la victoria en el Sprint y la carrera del domingo, más la pole y la vuelta rápida. Por eso y por el segundo lugar de su hermano Álex el propio competidor ilerdense lo calificó como su “top 1”, como “el mejor gran premio de su vida”.
Pero, ¿cómo le fue al ocho veces campeón del mundo en comparación con los otros pilotos que la fábrica de Borgo Panigale ha tenido en su historia en la clase reina? Pues sólo hay un piloto que lo hizo igual que él, con lo que el catalán superó al resto en su estreno de rojo. Así le fue a todos sus participantes permanentes estos años.
Capirossi y el aterrizaje ‘rosso’
Ducati entra en MotoGP oficialmente en 2003. Lo hace con Loris Capirossi y Troy Bayliss en su formación. El italiano debuta con un gran tercer lugar en Japón; mientas que el australiano comienza con un quinto lugar. ‘Capirex’ venció su primera carrera como ‘ducatista’ a la sexta, en Barcelona, en el que es el primer triunfo de la marca boloñesa. El oceánico estuvo en la escuadra dos años y no venció. Se fue a Honda un curso, de ahí a Ducati en Superbike, donde se hizo con el título en 2006. Como premio, corrió en Valencia supliendo a Sete Gibernau y ganó. Era su carrera 33 de rojo.
Carlos Checa no brilló
En 2005, Carlos Checa fichó por la escuadra de Ducati. Fue décimo en Jerez. Sólo estuvo una temporada ahí y nunca venció. Pero apreciaron su calidad y acabó ganando un título con ellos en Superbike (2011).
Sete Gibernau, con mil problemas
Sete Gibernau aterrizó en 2006 en la formación de Bolonia. Había sido segundo en parrilla en su estreno en Jerez, pero no acabó la carrera. Sólo estuvo una campaña, con muchos problemas y lesiones y ninguna victoria.
Stoner trajo el éxito
Casey Stoner llegó en 2007 y no pudo empezar mejor: triunfo en Qatar a la primera. Su año fue estelar, con diez victorias en 18 citas para acabar dando a Ducati su primer título en MotoGP.

Stoner, delante de Valentino Rossi, en Qatar 2007.
El fracaso de Melandri
Marco Melandri empezó con Ducati en 2008. Su adaptación fue traumática. Nunca le gustó la Desmosedici y sufrió desde el primer día. En su debut, fue 11º en Qatar. No ganó y hasta fue despedido sin acabar el curso. Las comparaciones con Stoner eran odiosas.
Nicky Hayden, cero victorias en cinco años
Nicky Hayden tampoco lució nunca con la Ducati, pese a estar cinco temporadas en su escuadra oficial, de 2009 a 2013. En su estreno, fue 12º en Qatar. Se fue sin lograr un triunfo en una época en la que Casey seguía ganando, aunque menos.
Las decepciones de Valentino Rossi
Valentino Rossi llegó a Borgo Panigale en 2012. Era el sueño de todo italiano, pero técnicamente nunca casaron bien. Su relación con Filippo Preziosi, el entonces gurú técnico, no funcionó y la moto no iba. Fueron sus años negros en MotoGP. Empezó con un séptimo en Qatar, pero las decepciones fueron constantes en sus dos campañas: sin victorias y con sólo tres podios y dos vueltas rápidas.

Valentino Rossi, en Qatar en 2011.
Dovizioso, de la reconstrucción al subcampeonato
Andrea Dovizioso llegó a Ducati en 2013, tras irse Rossi. Sabía que el proceso de mejoría técnica era lento y sólo creció al unirse a ellos Gigi Dall’Igna y lograr concesiones de MotoGP. En su estreno, ‘Dovi’ fue séptimo en Qatar. Ganó en su carrera 71 de rojo, en Malasia en 2016. Le faltó el título.
Crutchlow aguantó poco
Cal Crutchlow estuvo sólo una campaña de ‘rosso’, en 2014. Nunca se adaptó. Inició todo con un sexto en Qatar, un espejismo.
Iannone, chispazos, choque y adiós a la sequía
Andrea Iannone recayó en Ducati en 2015. Empezó muy bien, con un tercer puesto en Qatar. Tuvo ‘chispazos’ y ganó su primera carrera de rojo a la 28ª, en Austria 2016, en lo que supuso el fin de la larga sequía. Pero el de Vasto estaba sentenciado tras tirar a Dovi en Argentina unos meses antes.
Jorge Lorenzo y la paciencia
Jorge Lorenzo fue el fichaje estrella de Dall’Igna para 2017. Su ‘era’ se abrió con un undécimo en Qatar. Su acoplamiento fue muy difícil y lento. Tanto que Ducati optó por no renovarle a principios de 2018. Y justo empezó a ganar, en Italia 2018, 24 carreras después.

Jorge Lorenzo, con Ducati en 2017.
Petrucci y su buen inicio
Danilo Petrucci llegó para suplir a Lorenzo a comienzos de 2019, pero ya con experiencia sobre la Desmosedici. Empezó con un sexto en Qatar. Logró su primera victoria a la sexta carrera, en Mugello. Le faltó constancia.
Miller, fuego australiano
Jack Miller aterrizó de rojo en 2021. Venía con el bagaje de haber rodado con el Pramac. Se inició con un noveno en Qatar y sólo necesitó cuatro citas para imponerse en Jerez. Tuvo muchos altibajos, con grandes actuaciones y sonoros fracasos.
Bagnaia, la esperanza cumplida
Pecco Bagnaia también llegó del Pramac al conjunto oficial. Fue en 2021 y suplía a Dovizioso. Empezó con un gran tercero en Qatar. Su primer triunfo fue en Aragón 2021, en su carrera 12+1 con ellos… en un gran duelo contra Marc Márquez. Ahí cogió confianza para sus dos títulos posteriores tras ser subcampeón ese curso.
Una bestia lesionada
Enea Bastianini aterrizó en 2023 en detrimento de Jorge Martín. Lo eligieron por sus cuatro victorias con el Gresini Ducati. Todo se torció pronto, al caerse en Portugal y lesionarse. Ni corrió. Lo acabó haciendo en Mugello y fue noveno. Su primer triunfo llegó tras 12 pruebas, en Malasia.