Budapest es un circuito mucho mejor para el nuevo alerón delantero, que en Spa quitaron para la carrera del domingo

Fernando Alonso, con el morro nuevo, en el Sprint del GP de Bélgica.
Ni el circuito, ni las condiciones. Spa no fue el escenario apropiado para valorar la nueva evolución que tiene el coche de Alonso y Stroll, un nuevo alerón delantero que otorga más carga a la parte delantera y con el que el rendimiento del coche debería subir enteros para otro tipo de pistas empezando por el GP de Hungría, que comienza ya este mismo viernes.
Tras la carrera, en el ‘motorhome’ de Aston Martin, el jefe del equipo Andy Cowell, hacía varias reflexiones esperanzadoras a la prensa internacional, pese a los terribles resultados en cuanto a puestos que tuvieron sus pilotos. Hay conclusiones positivas que sacar y creen que la nueva pieza debe dar lo esperado en Budapest, este fin de semana.
Cowell ratificaba lo que se vio en la parrilla de salida de la carrera del domingo, que ni Fernando ni Lance montaban el morro corto, más recogido, que engancha con el segundo flap del alerón y que deja ujn gran canal entre ambos planos.
“Lo quitamos para la carrera principal, simplemente pensando que era una configuración para lluvia. Y los alerones delanteros se ajustaron más para la configuración de baja carga aerodinámica, para equilibrar el coche”, dice sobre las razones de no usarlo. No es que haya sido un fiasco, es que pensaban que en lugar de darles les iba a quitar.
“Siempre es decepcionante no puntuar en una carrera, pero si miro la forma en que todos en el equipo han ejecutado el fin de semana, no me puedo quejar. Sólo necesitamos volver a casa, revisar los datos y luego ir a Hungría a ver si podemos sumar puntos”, dice sobre lo que aguarda a lo largo de esta semana, antes de que lleguen las vacaciones de cuatro semanas para todo el personal de la F1.
Lo que ha llamado la atención es el buen fin de semana en Silverstone, con los dos coches en los puntos, se ha convertido en dos semana en ser el farolillo rojo con Alonso y Stroll cerrando la parrilla de salida del domingo en Bélgica.
“Todavía tenemos que analizar más detenidamente la clasificación, tanto el rendimiento en la clasificación Sprint como en la de ayer. Creemos que nos falta algo en el ritmo a una vuelta, pero lo analizaremos a ver qué encontramos”, decía sin aportar un motivo claro.
La última vez que Aston cerró una parrilla en F1 fue en Austin 2023, en un fin de semana Sprint y coincidiendo con un paquete de mejoras que fue todo un fracaso. Cowell no encuentra similitudes. “Creo que la prueba del alerón delantero salió bien y, operativamente, todo salió excepcionalmente bien. Es una temporada difícil para nosotros, en la que hemos dedicado poco tiempo al desarrollo del rendimiento del coche de este año. Ahora mismo no hay aerodinamistas, pero la actualización que llevamos a Imola fue más sólida de lo previsto. El suelo que usamos en Silverstone nos ha enseñado mucho, y el alerón delantero nos ha enseñado mucho aquí”, dice señalando que todas las actualizaciones en 2025 han aportado rendimiento.
Recursos mínimos para 2025, todo al 26
“El número de aerodinamistas que trabajaron en el suelo de Silverstone y el alerón delantero aquí es mínimo”, añade señalando que el objetivo era detraer lo menos posible de los recursos para el coche de 2026, que es realmente lo más importante.
Y se le preguntó también si el próximo circuito de baja carga, el de Monza, a la vuelta del verano, supone un escenario de pánico para el equipo. “No me preocupa Monza… Creo que los fines de semana de Sprint son ajetreados y creo que hemos terminado el trabajo de pruebas y podemos preparar un paquete para Hungría en adelante”, dice mirando al futuro inmediato con cierto optimismo.