Joan Mir destaca la buena base de la RC213V y aunque Argentina será completamente diferente a Tailandia, asegura que pueden “ser competitivos desde el principio”.
Hacía tiempo que un fin de semana de carreras para MotoGP no se afrontaba en Honda con tan buenas sensaciones, como el del próximo GP de Argentina. La segunda cita de la temporada se celebrará en un escenario que regresa tras cinco cursos de ausencia. Y ni siquiera la falta de referencias cercanas, ni su disparidad con el circuito de Buriram, hacen que a Joan Mir le surjan dudas sobre lo que son capaces de conseguir en Termas de Río Hondo. Nadie habla de victorias ni nada parecido al manillar del prototipo japonés en estos momentos, pero sí de una confianza inexistente hasta hace apenas cuatro meses que la nueva versión de la RC213V le ha devuelto a sus pilotos.
Ni siquiera empezar el curso con caída en carrera marcó el ánimo de Mir. Ese cero “no recompensó su trabajo” a lo largo de todo el gran premio en Tailandia como reconocen desde Honda, y por eso el balear prefirió quedarse “con lo positivo” de un inicio que le deja con ganas de más. El campeón de 2020 “está ansioso por volver a subirse a su RC213V y aprovechar su potencial y el de la moto”. En Buriram el prototipo japonés soñó con las cinco primeras posiciones junto al español (la mejor moto en carrera fue la de Johann Zarco, séptimo), que ahora tiene otra oportunidad de demostrar dónde está la marca del ala dorada tras todo el trabajo realizado durante el invierno: “Estoy deseando que llegue esta carrera después de lo que demostramos la última vez en Tailandia. Somos capaces de mucho y es importante sumar algunos puntos y cumplir”.
Por fin junto a una moto que le permite volver a disfrutar, Mir está ejerciendo de líder dentro del garaje japonés y sabe que “Argentina será un fin de semana diferente al de Tailandia, porque llegamos sin probar allí”. Sin embargo, lo que hace un año podía ser un dolor de cabeza, ahora solo es una circunstancia. Porque en Honda han desarrollado “una base muy fuerte con la que podemos ser competitivos desde el principio”. La confianza parece absoluta por parte del español hacia la nueva versión de la RC213V y siendo la séptima posición (en Moto2) el peor resultado de Joan en Termas, el balear está convencido de que “las piezas están ahí para tener un fin de semana sólido y que nuestra temporada siga progresando”. Hay esperanza.