Cuenta el incidente por el que fue investigado, al pasar por allí Bortoleto. Todo quedó en una advertencia
Carlos Sainz, en Silverstone.
Aparte de un trompo, que le costó una investigación (saldada con advertencia) por regresar a la marcha cuando pasaba Bortoleto por allí, el día de Carlos Sainz estuvo lejos de ser ideal. De nuevo se reprodujeron los problemas al colocar los blandos, con los que el madrileño ni siquiera mejoró, lo que le dejó en la 16ª posición en la FP2 de la tarde en Silverstone.
“Sí, creo que todos tuvimos nuestros buenos y malos momentos. Con viento en contra, el coche se siente increíble, con viento a favor, el coche se siente fatal”, resumía sobre una jornada complicada.
“Fue extremadamente difícil mantenerlo en la pista y ser consistente, pero hoy simplemente estábamos repasando nuestro programa. Elaboramos un programa centrado principalmente en nuestros problemas de fiabilidad y en intentar mejorarlos. Espero que mañana podamos centrarnos más en el rendimiento y profundizar en ello”, decía sobre ese puesto final, que no hay que tener en cuenta de momento.
Sobre lo sucedido con Bortoleto, Carlos afirmaba: “Es como si estuvieras atascado en medio de la pista y quisieras seguir adelante lo antes posible. En estos coches no tienes visibilidad ni nada, por los lados, así que estás básicamente atrapado en una posición muy extraña y desafortunada, y yo intentaba reincorporarme de la forma más segura posible para no causar ningún accidente. En este caso, desde dentro parece peor de lo que era en realidad”, decía sobre el pasaje, que no le ha costado sanción finalmente.
Con más frío o quizás un poco de lluvia mañana, Carlos señala sus expectativas: “Creo que el frío nos va a beneficiar. Veamos qué efecto tiene en el neumático blando. Es un neumático difícil de adaptar, como siempre para nosotros”, concedía.
“Y luego está el viento. Sinceramente, si tienes un poco de suerte con el viento aquí, podrías tener una vuelta increíble o una un poco