El ‘Inside’ de Aragón muestra imágenes no vistas del gran premio y su celebración… con Pecco Bagnaia

Todo Ducati celebra el doble podio en Aragón.
El GP de Aragón de MotoGP al fin trajo alegría a las dos partes del box de Ducati. Marc Márquez y Pecco Bagnaia gozaron del podio del domingo, aunque antes el italiano sufrió y mucho. Todo quedó reflejado en el ‘Inside’ (Desde dentro) de la casa boloñesa, en el que se muestran imágenes no vistas.
El episodio comienza con la reunión de los técnicos del jueves. Tras entrar Gigi Dall’Igna, el gurú ‘rosso’, Marc Márquez se marca un vacile. “Antes de empezar, debo decir que yo hago mis análisis en casa, por mi cuenta. Hice uno del sobrecalentamiento de la rueda delantera en Silverstone”, suelta a la par que saca un papel con el marcador de la final de la Liga de Campeones, el 5-0 del PSG al Inter de Milán, del que es fan Dall’Igna. “No sé si es justo o no”, ‘provoca’ Marc. “Sin Silverstone sufrimos y yo estaba en mi casa pensando sobre si era en la curva 10 o en la 11, pero no sé si es justo así”, añade sonriente. “Ahora me encargaré yo, me haré cargo de la situación”, responde el director general de Ducati Corse. Bagnaia, mientras, da el paseo de reconocimiento de la pista y le preocupa la goma que se queda en el trazado.
El viernes ya ruedan y Pecco comienza con sus ‘tradicionales’ problemas. “Al frenar, se me cierra de delante, me patina de delante”, expone.
Las camisetas de la ‘mamma’
Roser Alentá, madre de Marc y Álex, habla con Artur Vilalta, responsable de Comunicación, sobre sus cambios de camiseta para contentar a ambos. “Me llaman chaquetera. Michele (Masini, de Gresini), me hace ir con la de Álex todas las tardes y ahora me puesto esta (roja) porque Tardozzi me ha dicho que debería llevar la roja”, confiesa.
Los hermanos se encuentran al ir a hablar en las televisiones y se cruzan ‘dardos’ en broma. “Pesado”, le suelta Álex. “Pesado, tú, no me busques”, afirma Marc. “¿Qué estabas haciendo en el último intento de vuelta rápida? ¿Qué pasa que vas sobrado”, le inquiere Álex. “De momento, sí”, proclama el mayor entre risas.
Luego, el 93 sigue con la broma de las camisetas y su madre. “Estamos viviendo un gran momento, apoyó al que fue más rápido”, ironizó.
Los compañeros de equipo se encuentran antes de comparecer ante los fans y el turinés le dice las curvas en las que tiene dificultades. “Pecco, Pecco”, le grita la afición española. A Marc le dibujan un corazón… en los abdominales. En la cena, Bagnaia disfruta viendo a Sinner ganar a Djokovic en Roland Garros.

Marc Márquez, tras ganar el domingo en Aragón.
El sábado por la mañana el conjunto del líder planifica el día. “Usaremos blando y medio”, le dicen. “Mejor dejar un blando de ‘back up’ (reserva), aquí es muy importante la goma nueva”, avanza sobre lo que luego hará.
Muy agresivo
El leridano hace la pole y el de Chivasso se clasifica cuarto en parrilla. “Con la segunda goma, volví a apretar demasiado”, suelta Marc. “Cometiste algunos errores”, replica Rigamonti, su jefe técnico y él asiente: “Si voy fino, voy más fuerte”.
Nicolò Mancinelli, jefe de desarrollo de la moto, actualiza todo. “En el Sprint saldrán con la goma trasera media, aunque se destruye y hace mucho calor”, expone.
Antes de salir, el octocampeón hasta hace una ‘recomendación’ a un mecánico: “A esa chica que sabes, le tienes que decir: ‘Ponte a la sombra, porque los bombones al sol se derriten’”. Los técnicos, a lo suyo. “Todos ponen el blando atrás”, le dicen a uno de Michelin. “Todos se equivocan”, replica. “Fermín (Aldeguer) ha dado un paso, estará ahí”, le sueltan a Tardozzi. Y acertaron.
Marc vence el Sprint y Pecco es sólo 12º. La parte del box del de Cervera va al lugar del podio. “Hemos ganado”, dice Javi Ortiz, su mecánico. “Demasiada potencia. En la última vuelta, apreté, no me pude relajar”, afirma Marc.
Bagnaia se encuentra con Jack Miller, antiguo compañero suyo, que le pregunta: ‘¿Mañana, mejor o peor?’. Pecco es diplomático: ‘Lo intentaremos’. El australiano le anima: “Yo iba con el medio, es jodidamente bueno”.
El de Cervera es felicitado por Dall’Igna. “Lo hiciste muy bien al no exagerar en las primeras vueltas; tenía miedo de que fueras ansioso”, indica.
Domingo de aplausos
Todo son aplausos el domingo, al imponerse Marc y ser tercero Bagnaia. “Eso es una victoria”, le suelta Gigi en el parque cerrado. El octocampeón hasta tiene palabras para Pecco. “Enhorabuena, gran carrera, te has recuperado”, le suelta. “Hoy viste de rojo”, le espeta a Masini y Álex por la camiseta de la madre.
El turinés y su compañero de la Academia de Valentino Rossi Marco Bezzecchi miran los ritmos en los papeles. “Mira si quieres ver a alguien que iba fuerte”, bromea ‘Bez’ respecto a su remontada. Pecco asiente. “¿Le cogiste?”, pregunta el de Aprilia respecto a un ataque a Álex. “No, porque iba igual que yo”, admite el 63.
Los dos llegan al box, donde son felicitados y abrazados. “Ducati estaba en crisis, ¿no?”, suelta con ironía Marc, pues hubo triplete ‘ducatista’ y dominan la general. Sólo llevaban dos carreras largas sin ganar. Corre el Prosecco.
Todo acaba con una broma más. “Mañana, en la reunión para el test, vamos a sacar esto”, le suelta un mecánico mostrándole dos fotos de él caído en el suelo. “Qué cabro…”, responde él entre risas.