El equipo italiano no abandona su SF-25 e implantará una nueva suspensión, según adelanta ‘AutoRacer’, a un coche muy alejado del rendimiento esperado

Hamilton, por delante de Leclerc en Miami.
Queda claro que Ferrari no puede quedarse de brazos cruzados. El mal inicio de 2025 de la ‘Scuderia‘, donde solo suma tres podios (dos de Hamilton al sprint y uno de Leclerc en Jeddah) y la crisis desatada en Miami abría un momento de profundas dudas en el equipo que une a dos talentos diferenciales de la parrilla de la Fórmula 1, Charles Leclerc y Lewis Hamilton. ¿Merece la pena luchar en un curso de último año de reglamento? ¿O es preferible guardar muebles -y presupuesto- para 2026?

Hamilton y Leclerc, en el box de Ferrari.
Porque la cosa no está funcionando. El coche rojo ha caído al cuarto -o quinto, dependiendo de Williams- de la Fórmula 1 y vive, de nuevo, la historia de una caída anunciada. Ferrari cerró 2024 como un curso muy positivo, donde sus soluciones habían encontrado el método perfecto contra la degradación. De eso ahora queda poco. Pero se ve también a lo largo de los cursos del reglamento, pues Ferrari empezó el ya lejano 2022 con… el mejor coche. Cualquier parecido con la realidad actual…
En búsqueda de soluciones
Pero Ferrari ni quiere ni puede ‘pasar’ por completo de 2025 y parece que en la Gestione Sportiva de Maranello ya se mueven fichas para aterrizar con alguna alegría más en verano, punto siempre culminante de los calendarios de la F1. El equipo liderado por Loic Serra ya trabaja y según adelanta ‘AutoRacer’, Ferrari tendrá novedades importantes.
Todo un plan contra la crisis. Concretamente, se centrará en la suspensión. Es una pieza clave que se debe regular dentro de las configuraciones y con las que Ferrari no da en el clavo. Pasó en Australia, por ejemplo, donde pasaron de referencia a la ‘nada’. Y en la parte trasera parece que Ferrari hace énfasis para terminar de encontrar las soluciones óptimas en anclaje y recorrido.

Hamilton y Leclerc, en el GP de China.
Sería otro cambio importante. Se sumaría al nuevo fondo y buscará un coche más dócil, capaz de ser ajustado para dar un paso más tanto a una vuelta como en carrera y aporte calma a los ‘excitados’ Leclerc y Hamilton. En Miami todo estalló y el balance de puntos no fue nada bueno más allá de la habilidad del británico en el caos de la carrera corta del sábado.
Tengo optimismo de cara al futuro. Creo que este coche todavía tiene rendimiento, pero algo nos está retrasando en este momento
“Tengo optimismo de cara al futuro. Creo que este coche todavía tiene rendimiento, pero algo nos está retrasando en este momento. Hemos perdido rendimiento desde China, está ahí y no podemos utilizarlo. Hasta que no lo arreglemos, estamos aquí. Pero podemos trabajar en otras cosas y otros procesos”, confesó Hamilton. Una visión optimista que se une a los cambios de Ferrari para salir del agujero.