Andy Cowell confiesa que será un banco de pruebas y anuncia mejoras ya en Ímola

El Aston Martin de Stroll en Miami.
El GP de Miami de F1 fue un desastre para Aston Martin en todos los sentidos. Sus dos pilotos, Fernando Alonso y Lance Stroll, acabaron penúltimo y último, 15º y 16º. Sólo los que abandonaron, Doohan, Bearman Bortoleto y Lawson, quedaron detrás en la clasificación.
De hecho, sólo sus dos monoplazas y el Sauber de Nico Hulkenberg fueron doblados en carrera. Quitando dobles abandonos, es el peor resultado de la escudería británica desde 2023. Claro que visto lo visto, puede que esto ocurra más a menudo.
Descontento
Andy Cowell, el jefe de equipo, comparecía con rictus serio ante los medios a la conclusión de la prueba estadounidense y era escueto en sus valoraciones. “El resultado refleja el nivel de rendimiento actual del coche y no estamos contentos con ello. Estamos analizando toda la información que tenemos de los pilotos y de los datos, intentando entender. Esa es nuestra evaluación general”, afirmaba.
Pista representativa
Lo preocupante para los de Silverstone es que la pista de Florida no tiene ninguna peculiaridad que la haga singular, con lo que no hay nada a lo que agarrarse para justificar estos pobres resultados. “Es un trazado bastante representativo. Ahora mismo no tenemos un área concreta donde destaquemos negativamente: hay muchos problemas que resolver. Algunos han mejorado; otros, no. Pero es otro evento del que sacamos datos para alimentar nuestras herramientas de simulación”, confirmaba.

Stroll y Alonso hablan en Miami.
Banco de pruebas
El ejecutivo de las Islas admitía que utilizarán el AMR25, el monoplaza de este curso, para ir metiendo piezas con vistas a la fabricación del de 2026, que es lo único que importa para los ingleses. “Hay tecnologías pensadas para 2026 que vamos a probar en el coche de 2025. Es la única forma de validar cosas para el futuro: si funciona en carrera, funciona de verdad. Así que vamos a usar este coche para testear y perfeccionar herramientas en un equipo aún joven, que ahora empieza a usar recursos que los equipos grandes llevan décadas aprovechando”, aseveraba refiriéndose a su nuevo túnel de viento.
Porque la temporada venidera es la única meta real para Aston Martin, con su flamante fichaje, Adrian Newey, centrado única y exclusivamente en ese bólido.
Mejoras próximas
Cowell igualmente desveló que, pese a todo, sí habrá actualizaciones en las próximas citas para el AMR25, pero que algunas hasta tienen que ver con la reglamentación que impone la F1 para este curso. “Vamos a llevar algunas piezas a Ímola. Tenemos que decidir si es lo correcto, pero también habrá cosas nuevas en Mónaco y en Barcelona. Algunas están relacionadas con el cambio normativo sobre la rigidez de los alerones delanteros”, reconoció.
Recado… a Ferrari
El dirigente británico hasta se salió por la tangente ante una dura pregunta en la que le espetaban que Aston Martin no estaba haciendo nada en 2025. “Quizá debamos apretar un poco las tuercas. Puedes avisar a Fred”, replicó refiriéndose a Vasseur, el jefe de Ferrari, cuya escudería tampoco está dando la talla en esta campaña.
Sea como fuere, los coches verdes siguen yendo a menos. En el Mundial de pilotos, Stroll es décimo con 14 puntos y Alonso, 17º sin haber puntuado. En el de Constructores, Aston Martin es séptimo, con esos 14 puntos del canadiense, pero los de detrás, Racing Bulls, Alpine y Sauber se van acercando. El 2025 va a ser un calvario, todo sea por aspirar a todo en 2026.