La estadounidense habló en rueda de prensa
Anisimova, durante la final ante Swiatek.
Horas después de la histórica derrota (6-0 y 6-0, en 57 minutos) encajada ante Iga Swiatek en la final de Wimbledon, Amanda Anisimova había asimilado todo lo que se podía asimilar. Salió a rueda de prensa mucho más relajada, y consciente de lo que había pasado en uno de los peores partidos que ha jugado nunca. Tocada, claro, pero dispuesta a hablar de ello.
La estadounidense, que eliminó a Sabalenka, la número uno mundial, en semifinales, analizó lo ocurrido.
Derrota dolorosa: “No es algo fácil de superar… Me dije a mí misma que definitivamente saldré más fuerte después de esto”.
No es algo fácil de superar… Me dije a mí misma que definitivamente saldré más fuerte
Superarlo: “Obviamente, fue un poco difícil de digerir. Sobre todo el durante y justo después. No es como hubiera querido que fuera mi primera final de Grand Slam. Creo que también quedé un poco en ‘shock’. Pero me dije a mí misma que definitivamente saldría más fuerte después de esto. No es fácil superarlo. Perder 6-0 y 6-0 en una final de Grand Slam. Si acaso, lo veo como algo positivo y como motivación para el futuro. Obviamente, tengo muchas cosas que hacer para progresar”.
No es como hubiera querido que fuera mi primera final de Grand Slam
El torneo: “Han sido dos semanas maravillosas que siempre recordaré. Iga jugó muy bien; yo estaba paralizada y sin energía, pero ella es una jugadora increíble y se merece ganar. Hoy fue muy difícil, sobre todo porque era mi primera final. Estaba en shock, pero me dije a mí misma que debía intentarlo de nuevo y usar esta derrota como trampolín para mejorar. Estaba nerviosa, como si hubiera perdido el ritmo. Hoy entrené y me sentí muy cansada; dos semanas en un Grand Slam pasan factura. Tendré que trabajar en esto, en mi condición física, pero aun así fue una gran experiencia y algo que me llevaré como jugadora. No sé qué pasó, pero trabajaremos en ello. Dije mucho durante mi discurso, lloré mucho, pero aun así es un reconocimiento a mi equipo por lo que hemos hecho este año. Mi saque no me ayudó hoy, y definitivamente es un aspecto que necesito mejorar”.
Estaba nerviosa, como si hubiera perdido el ritmo. Hoy entrené y me sentí muy cansada
Su familia: “Cuando regresé al vestuario, cambié de mentalidad y me dije a mí misma que hoy era una oportunidad para lograr otros grandes objetivos. Conocer a la Princesa fue fantástico y muy emotivo. Fue muy amable y me dijo que mantuviera la cabeza alta y me sintiera orgullosa. Estoy rodeada de tanta gente que me quiere, y estoy deseando tomarme unos días libres para recargar las pilas. Mi madre ha sacrificado mucho para que yo haya llegado hasta aquí en mi vida y mi carrera, y es a ella a quien más tengo que agradecer. Soy una hija afortunada. Durante el partido, me di cuenta de que mi nivel estaba bajando, y reflexionaré sobre las causas en los próximos meses. Estas semanas me han enseñado que nadie es perfecto, que hay que aceptar los errores que cometí en la final y no ser negativa”.