Esa circunstancia sólo se repite en la gira británica de hierba para Queen’s y Wimbledon

Alcaraz, junto al equipo y familia que le acompañó en Indian Wells 2024.
Carlos Alcaraz se instaló a última hora del lunes en su casa de Indian Wells después de un largo viaje con conexión en Dallas y posteriormente a Palm Springs. El murciano, por tercer año seguido, comparte una majestuosa residencia con todas las comodidades junto a su familia y equipo.
Entre las cuatro paredes están, además del tenista de El Palmar, Juan Carlos Ferrero (técnico); Juanjo Moreno (fisioterapeuta), Alberto Lledó (preparador físico); Albert Molina (agente), Álvaro Alcaraz (hermano y sparring); Carlos Alcaraz (padre) y Tomás Noguera (tío). La única ausencia respecto a 2024 es la de Juanjo López, el prestigioso médico del jugador y que estuvo en Australia y en Doha, y está siempre que sea necesario.
La convivencia entre todos es una de las claves del éxito de Carlitos, que se aleja del ruido y la frialdad propia de los hoteles. A la hora de cocinar todos aportan su granito de arena.
No es casualidad que haya ganado las dos últimas ediciones del Masters 1000 californiano coincidiendo con el cambio del hotel a la casa. Esta circunstancia sólo se repite en la gira británica de césped.
Alcaraz alquila, por espacio de un mes, una vivienda a escasos metros del All England Club. Allí se hospeda para los torneos de Queen’s y Wimbledon. Ha ganado dos veces consecutivas el grande de la hierba y en el año 2023 también se impuso en el certamen preparatorio.
Una nueva residencia para Queen’s y Wimbledon
El séquito del campeón de cuatro grandes es tan amplio que ha obligado a buscar una residencia más grande a partir de 2025 en el exclusivo barrio de las afueras de Londres. La nueva localización está pegada a las pistas de entrenamiento del Aorangi Park.
Indian Wells es el torneo perfecto para combinar la competición oficial con las partidas de golf. A Alcaraz le rodean cientos de hectáreas de campos para mejorar su hándicap e intentar acercarse al 1,4 que presenta su entrenador Ferrero.
El murciano tiene en los palos su particular terapia para desconectar del tenis y empaparse de naturaleza. Lo que su fisio Juanjo describiría como vitamina N. La seguía entre partidos en el pasado Open de Australia y también en los días libres en su Murcia natal. “Le ayuda a desconectar del tenis porque está rodeado de verde, en medio de la naturaleza y ese tipo de ubicación a Carlos le encanta. Él es muy competitivo y juega al golf totalmente en serio y para ganar”, cuentan desde su equipo.
Exploding Kittens, su juego favorito
Alcaraz, equipo y familia pasan muchas horas muertas tanto en casa como en el club esperando a los partidos. Sobre la mesa nunca falta el Explodding Kittens, el juego de cartas favorito del número tres mundial y su entorno.
Se coloca la baraja bocabajo y los jugadores roban cartas por turnos hasta que a uno de ellos le sale un Exploding Kitten. Cuando esto sucede, el jugador queda eliminado.