Atlanta, GA — La tensión en la WNBA alcanzó niveles nunca antes vistos cuando un enfrentamiento en la cancha se salió completamente de control. El partido, que parecía uno más de la temporada, terminó con jugadoras cara a cara, empujones intensos y seguridad corriendo al centro de la duela para evitar lo peor.
En el centro del caos: DiJonai Carrington, estrella en ascenso del Connecticut Sun. Por días, la liga guardó silencio, pero ahora Carrington ha hablado, y lo que dijo está sacudiendo a toda la comunidad del baloncesto.
“Esto no fue solo una pelea. Fue una reacción a meses — incluso años — de falta de respeto y provocaciones”, confesó Carrington en una entrevista sin filtros publicada en redes sociales.
La jugadora no solo defendió sus acciones, sino que también acusó a otras figuras de la liga de crear un ambiente tóxico dentro y fuera de la cancha.
“¿Cuántas veces más vamos a quedarnos calladas? ¿Hasta cuándo vamos a dejar que ciertas jugadoras se salgan con la suya solo porque tienen nombre?”, preguntó con firmeza.
Las declaraciones provocaron una ola de reacciones: algunas compañeras de equipo la apoyan, mientras que fans y analistas están divididos. En Twitter, el hashtag #TeamCarrington se volvió tendencia, pero no faltaron quienes la criticaron por “incendiar más el drama”.
La WNBA aún no emite una declaración oficial sobre posibles sanciones o investigaciones. Sin embargo, fuentes cercanas afirman que se está considerando una revisión completa de los protocolos disciplinarios.
¿Es este el inicio de una guerra interna en la WNBA? ¿O simplemente una jugadora que se atrevió a decir en voz alta lo que muchas piensan en silencio?