La WNBA se encuentra en el ojo del huracán tras una controversia inesperada. Según varios reportes que circulan en redes sociales, Brittney Griner supuestamente se refirió a la estrella emergente Caitlin Clark como “una maldita chica blanca basura”, un comentario que generó indignación inmediata y opiniones divididas entre los aficionados.

Aunque ni la WNBA ni la propia Griner han confirmado o negado la veracidad de esas palabras, las reacciones no se hicieron esperar. Pero lo que realmente encendió la conversación fue la intervención del legendario exjugador de la NBA, Shaquille O’Neal.

Sin mencionar directamente a ninguna de las dos jugadoras, Shaq publicó un breve pero contundente mensaje en redes sociales que fue interpretado por miles como una respuesta directa al escándalo:

“El respeto va en ambos sentidos.”

La publicación se volvió viral en cuestión de horas, acumulando millones de visualizaciones. Los fans de Caitlin Clark —quien rápidamente se ha ganado el corazón del público por su talento y humildad— aplaudieron la postura de Shaq. Por su parte, los seguidores de Griner intentaron defenderla, exigiendo contexto o negando que lo haya dicho.

“Caitlin solo vino a jugar”

Caitlin Clark, conocida por su temple y enfoque en la cancha, no ha respondido públicamente a la polémica. Sin embargo, sus seguidores siguen mostrándole apoyo incondicional, destacando su profesionalismo ante la creciente tensión.

Una liga bajo la lupa

Este episodio llega en un momento clave para la WNBA, que vive una etapa de crecimiento acelerado… y también de mayor escrutinio. Para muchos, esta polémica no solo gira en torno a dos estrellas, sino que pone sobre la mesa temas delicados como el respeto, el racismo y la cultura en el deporte femenino.

Si se confirma la veracidad del comentario, Griner podría enfrentar consecuencias serias en términos de imagen pública y relaciones dentro de la liga. Y sobre las cinco palabras de Shaq, queda claro que, a veces, un mensaje breve puede retumbar más que cualquier discurso largo.