El infielder firmó un contrato por $120 millones de dólares
Alex Bregman no perdió tiempo en marcar la diferencia con los Red Sox de Boston. El mismo día de su presentación oficial, Robert Bradford de WEEI reveló que el infielder se sentó a comer con los tres prospectos más prometedores no solo del equipo, sino de todo MLB: Kristian Campbell, Roman Anthony y Marcelo Mayer. Lo que comenzó como un desayuno casual se convirtió en una hora de conversación que dejó una huella imborrable en los jóvenes.
“No diría que me tomó por sorpresa, pero definitivamente lo aprecié”, dijo Mayer. “El tipo acaba de firmar por $120 millones y no esperas que se siente a hablar con tres jugadores de ligas menores. Tuvimos una gran charla. Ya ama estar aquí y está muy emocionado por el futuro”.
Campbell, por su parte, admitió que no sabía qué esperar. “Nunca lo había conocido antes, pero definitivamente superó mis expectativas”, comentó. Bregman no solo compartió consejos sobre preparación y mentalidad, sino que también dejó en claro su deseo de ganar.
“Quiere ganar y quería que lo supiéramos”, dijo Anthony. “Nos está motivando para llegar a ese nivel. Quiere jugar con nosotros, y eso es muy inspirador”. La charla abarcó desde técnicas de bateo hasta la mentalidad necesaria para triunfar en las Grandes Ligas.
El impacto de Bregman no se limitó a esa conversación. En sus primeros días con el equipo, el infielder ha estado presente en los campos de entrenamiento, las jaulas de bateo y los vestuarios. Su disposición para compartir conocimientos y aprender de los demás ha impresionado a todos.
Pete Fatse, entrenador de bateo de los Red Sox, destacó la influencia inmediata de Bregman. “Lo más impresionante es cómo se ha integrado y ha dirigido conversaciones sobre enfoques y preparación. Ha ayudado a iniciar muchas de esas discusiones. Es un ratón de béisbol, le encanta aprender y compartir”.
Bregman también ha trabajado de cerca con jugadores como Rafael Devers y Vaughn Grissom, compartiendo técnicas de fildeo y estrategias para dobles plays. Su presencia ha sido un catalizador para elevar el nivel de competencia en los entrenamientos.
“Es definitivamente diferente”, dijo el jardinero Rob Refsnyder. “Un jugador como Alex trae mucho al campo, pero también fuera de él. Realmente se preocupa por todos, por cómo pueden mejorar y cómo él puede mejorar. Hay conversaciones constantes sobre lanzamientos y reportes de scouting. Es lo que hacen los equipos ganadores”.
Con Bregman a bordo, los Red Sox no solo han ganado un jugador estelar, sino también un líder natural. Su influencia ya se siente en el clubhouse, y los prospectos están ansiosos por aprender de uno de los mejores.