¡Drama total en la WNBA! Las cosas están que arden en el vestidor de Chicago Sky después de que el equipo fuera etiquetado como el peor de la liga. En una decisión que nadie vio venir, el entrenador del equipo tomó una medida radical: mandó a la banca a Angel Reese y Kamilla Cardoso, las dos jugadoras más mediáticas del plantel.

Según fuentes cercanas al equipo, la tensión venía creciendo desde hace semanas. Las críticas en redes sociales, los malos resultados y la presión mediática habrían colmado la paciencia del cuerpo técnico, que decidió actuar con firmeza para “sacudir al equipo”.

La decisión que rompió el vestidor

El ambiente en el vestidor habría quedado completamente dividido tras la decisión. Mientras algunas jugadoras habrían apoyado al coach, otras vieron el movimiento como un ataque directo a las estrellas jóvenes del equipo.

“Esto no es disciplina, es humillación. ¿Cómo esperas que mejore el equipo si castigas a tus mejores piezas?”, escribió un fan molesto en redes.
“Por fin alguien pone orden. Hay actitudes que no ayudan al equipo y hay que corregirlas,” opinó otro.

¿Castigo táctico o mensaje interno?

Aunque el entrenador no ha dado declaraciones formales, varios reportes aseguran que no se trata de una sanción definitiva, sino de un intento de “reencaminar la mentalidad” del grupo. Aun así, muchos aficionados y analistas deportivos ya hablan de una crisis interna en Sky que podría terminar en cambios profundos dentro del roster.

Angel Reese y Kamilla Cardoso, dos de las jugadoras más populares y seguidas en redes sociales, no se han pronunciado directamente al respecto. Pero sus gestos y mensajes ambiguos en Instagram han avivado aún más el fuego entre los fans.

¿Será esta la chispa que provoque una revolución dentro de Chicago Sky? ¿O estamos ante el principio del fin de un proyecto que prometía romperla en la WNBA? El futuro del equipo, y de sus estrellas, está más incierto que nunca.