En Austin, Aston Martin sólo pudo batir en ritmo a Sauber, el resto de equipos tenía un coche con más ritmo.

Fernando Alonso, durante el Gran Premio de EE.UU.EFE

Aston Martin vio de nuevo cómo, a pesar de llevar a Texas unas piezas nuevas en cuanto a aerodinámica (ala delantera, pontones, suelo y difusor), su ritmo de carrera no sólo no mejoraba sino que empeoraba incluso respecto a las citas anteriores. Haas, RB e incluso Williams y Alpine mostraron un mejor paso de carrera en Austin que el AMR24 de Fernando Alonso y de Lance Stroll.

En términos de resultado, el asturiano perdió seis posiciones desde el séptimo de salida hasta el 13º y fue por puro ritmo. No podía defenderse de casi nadie, pues de otra forma no le salían las cuentas de la para única, mientras un debutante como Liam Lawson lo pasaba en e tramo inicial y le sacaba 2 segundos en apenas cuatro vueltas. Colapinto lo hizo en la 23 y ni siquiera pudo hacer amago de defenderse.

Los datos de las medias de vuelta en la carrera sitúan a Aston como el penúltimo equipo, superando sólo a Sauber y no por mucho, constatando que esta temporada se les está haciendo insufrible. Era un fin de semana para progresar y siguen cayendo en prestaciones reales. La llegada de Adrian Newey se hace cada vez más urgente para un equipo perdido por completo. Lo hará además con el nuevo túnel de viento en funcionamiento, porque con el de Mercedes actual no encuentran correlación alguna con la pista.

Fernando pudo superar a los dos Sauber, pero Stroll tuvo un ritmo global de 1:41.022 por vuelta, sólo 0.052 mejor que Guanyu Zhou , con 1:41.074 y a 2,1 segundos del Ferrari de Leclerc. Un drama.

Han perdido 0,4 segundos desde Bahréin

En los datos globales del año, el coche de Alonso ha perdido 0,4 segundos respecto al coche referencia a lo largo de las 18 citas disputadas hasta Singapur. El que más he mejorado es McLaren, aunque en Austin Ferrari fuera el más veloz. No es que sean ahora más lentos, es que los rivales han progresado mucho más que ellos.

Revisando la carrera Sprint del sábado, que fue con un solo juego de medios que llegaba sin problemas hasta el final, fue muy parecido. Sólo superaron a los Sauber, en una tendencia que no por esperada deja de ser muy dolorosa. En México, la pérdida de carga por la altura puede hacer mucho daño a este Aston, que si de algo adolece es de carga global en su coche respecto a la competencia. Hay que esperar que el análisis de las piezas nuevas les permita dar un paso adelante, aunque sea pequeño en los reglajes del monoplaza, pera que no se repita el sufrimiento de este fin de semana.

Con esa evolución del coche, los 62 puntos de Alonso y su noveno puesto en el campeonato de pilotos parecen ciencia ficción. Como Verstappen rasca y obtiene de donde no hay. Y en cuanto haya otra oportunidad, estará de nuevo para sumar y cosechar para su equipo. Aston se desangra, pero Fernando aún tiene para donar y regalar.