Cuatro grandes grupos de trabajadores no entran en este incremento de percepciones
Incremento del poder adquisitivo en México.
Aunque la presidenta Claudia Sheinbaum inició su mandato con una propuesta ambiciosa para incrementar el salario mínimo en México, no todas las trabajadoras y trabajadores podrán disfrutar de este beneficio. A partir de 2025, el ingreso diario pasará de $248.93 a $278.80 pesos en gran parte del país, lo que supone un paso importante hacia una mayor capacidad adquisitiva. Sin embargo, millones de personas quedarán al margen de este cambio.
Aunque el aumento al salario mínimo beneficiará a una parte importante de la población, queda claro que el desafío de incluir a quienes trabajan bajo esquemas informales o independientes sigue sin resolverse. Esta exclusión resalta la necesidad de reformas adicionales que amplíen la protección laboral a todos los sectores.
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La historia reciente del aumento al salario mínimo
Desde 2018, el salario mínimo ha tenido un aumento significativo del 135%, y este último ajuste busca consolidar ese progreso. Quienes reciban este ingreso podrán adquirir hasta 1.85 veces más productos de la canasta básica en comparación con años previos, según las cifras proyectadas. Para muchas familias, esta medida significa una oportunidad de mejorar su calidad de vida.
El incremento es un paso positivo, pero todavía hay un largo camino para garantizar un impacto real en la economía de millones de mexicanas y mexicanos.
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Los cuatro grupos que no reciben incremento salarial
Aunque el panorama parece alentador, hay diversos sectores laborales que no podrán beneficiarse del nuevo salario mínimo. Entre ellos destacan:
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Personas contratadas por honorarios: Trabajadoras y trabajadores independientes, como freelancers o consultores, no están protegidos por las disposiciones de la Ley Federal del Trabajo (LFT) y, por tanto, quedan fuera del ajuste.
Quienes ganan más del salario mínimo: Las personas con sueldos superiores al mínimo no tienen garantizado un incremento proporcional, ya que esto dependerá de negociaciones individuales o políticas empresariales.
Empleadas y empleados por comisiones: En sectores como ventas, donde los ingresos dependen principalmente de comisiones, el impacto del aumento es prácticamente nulo. Aunque algunos reciben un salario base ligado al mínimo, su principal ingreso proviene de metas alcanzadas.
Trabajadores informales: Cerca del 55% de la población trabajadora en México opera en el sector informal, según el INEGI. Al no contar con contratos formales, estas personas no están cubiertas por los cambios al salario mínimo.
