Si el dominicano reconsidera su postura, tal como esperan algunos personajes en el circuito, habrá consecuencias para jugadores de la plantilla. El nombre del afectado dependerá del rol que le asignen a Devers

Los Medias Rojas de Boston venían asomando su intención de que Rafael Devers hiciera una transición de la tercera base a un rol diferente. Pero con la firma de Alex Bregman el plan podría ejecutarse en la temporada de MLB que está próxima a comenzar.
La idea nunca ha sido del agrado del dominicano, que siempre ha dado la misma respuesta “Soy un tercera base”. En esta primavera el jugador de 28 años de edad se ha mostrado inflexible y la situación amenaza con perturbar el clima en el dugout de Alex Cora, que dijo a periodistas de Grandes Ligas que tomará su decisión pensando en lo que más convenga al equipo y no a intereses personales.
Pero existe la creencia de que a pesar de su actitud actual, Devers terminará por ceder. Al menos así lo cree el analista de ESPN Buster Olney.
“Mientras otros equipos ven a Devers trazar una línea en la arena en los últimos días y decir que la tercera base es suya, y que no servirá como bateador designado, el amplio consenso fue: Sí, eventualmente se moverá. Porque en el fondo, es un tipo tranquilo”, escribió Olney, citando a personas del circuito e incluso de Boston. “Es como muchos de nosotros: le gusta agradar. Va a pasar tiempo con Bregman y sus otros compañeros y va a ver qué tan bueno puede ser el equipo, y dirá que sí”.