Durante sus primeros años de vida el actor creció en un entorno poco favorable que lo llevó a lucha desde muy pequeño y a sobreponerse a todo tipo de situaciones adversas
Eduardo Yáñez durante el pizarrazo por inicio de grabación de la telenovela “Golpe de suerte”, en calles de la colonia Molino de Rosas. (Cuartoscuro)Eduardo Yáñez, el polémico actor mexicano que nuevamente está en el ojo público, tuvo una infancia marcada por la adversidad, tiempo durante el cuál estuvo en contacto con gente encarcelada y vendía lo que podía en las calles para poder subsistir.
El histrión se crió en una cárcel, su madre era celadora, y en ese contexto se convirtió en el hijo de todas las presas. Su infancia fue dura, atravesada por episodios de abuso y de maltrato. Ante la figura de un padre ausente, su madre lo llevó a vivir a la prisión, donde creció y se convirtió en un sobreviviente, según relató a la periodista Mariana Dahbar en una entrevista con Infobae en 2021.
“Era el hijo de las presas, el amigo de los presos”, señaló en la entrevista en la que habló de esos años como si fueran parte de un universo paralelo, donde el director de la penitenciaría se enamoró de su madre y terminó casándose con ella. “Fue una historia de amor especial”, admitió. Su infancia se dividió entre los barrotes y las pequeñas libertades, un contraste que lo marcó para siempre.
Durante su tiempo en la cárcel, aprendió a adaptarse a circunstancias difíciles y a encontrar maneras de sobrevivir. A medida que crecía, se vio obligado a trabajar en la calle para ayudar a su familia. Realizaba diversas actividades informales, lo que le enseñó el valor del esfuerzo y la perseverancia. Estas experiencias moldearon su carácter y le dieron una visión única del mundo.
“Vendí gelatinas, paletas, zapatos… lo que fuera para salir adelante”, recordó. En sus días de secundaria, encontró un refugio inesperado en el fútbol americano. “Ahí conocí a mis verdaderos hermanos, a mis segundos padres”, dijo, refiriéndose a los entrenadores que, con apodos como Coach Víctor y el Greñas, lo moldearon. “Ellos te terminan de criar”, señaló en la entrevista.
De la cárcel a los reflectores
Eduardo Yáñez logró tener papeles en producciones estadounidenses y consolidarse en la televisión mexicana. (ALBERTO VERA/CUARTOSCURO)A pesar de los desafíos que enfrentó en su juventud, Eduardo Yáñez logró abrirse camino en el mundo del entretenimiento. Su talento y dedicación lo llevaron a convertirse en un reconocido actor, destacándose en papeles complejos, incluyendo uno de psicópata en una serie de Netflix. Su historia es un testimonio de cómo las dificultades pueden ser superadas con determinación y trabajo arduo.
Participó en reconocidas películas estadounidenses, tales como Striptease; The Punisher, Man on fire y en las series Cold Case y CSI: Miami. Además de consolidarse como uno de los actores principales de la televisión mexicana por sus papeles en telenovelas como Destilando amor, Fuego en la sangre y Yo Compro a esa mujer, esta última lanzaría al estrellato al actor en 1990.
La polémica y presunta enfermedad de Yáñez
El actor no ha estado exento de polémicas recientemente fue acusado por conductas violentas por su exabogada con quién tuvo una relación de 8 meses. (JOSÉ CANDELARIO/CUARTOSCURO)El pasado 2 de diciembre, Mariana Gutiérrez quien fuese abogada y pareja del actor reveló detalles sobre las conductas violentas, manipuladoras y los problemas personales del actor que la llevaron a terminar la relación y emprender acciones legales en su contra.
La abogada compartió que conoció a Yáñez hace tres años, cuando comenzó a asesorar sus temas legales relacionados con el departamento de su madre. Lo que inició como una relación profesional se convirtió en amistad y posteriormente en una relación sentimental.
Sin embargo, mencionó que con el tiempo empezó a sentirse incómoda en la relación debido a los extremos celos que tenía el actor, además, señaló que el actor tiene una adicción a la marihuana y enfrenta problemas de salud como principio de Parkinson y problemas en la columna y rodillas.
Según declaraciones de la jurista, su relación con el histrión terminó luego de un incidente en el que Yáñez la intimidó.
“Pensaron que me iba a pegar, pero golpeó la mesa. Le dije: ‘Esta es la última vez que me vas a ver. ¡Estás enfermo!’ Lo bloquee de todas partes y ejercí contacto cero. Ese día tuve la certeza de que estuve a nada de que me golpeara, aunque nunca lo hizo”, compartió Mariana Gutiérrez en entrevista para TVNotas.