LOS ÁNGELES — Teoscar Hernández estará en el jardín derecho de los Dodgers de Los Ángeles la próxima temporada cuando los campeones de la Serie Mundial intenten defender su título.

El jardinero estuvo en el Dodger Stadium el viernes después de haber acordado reincorporarse al equipo con un contrato de tres años por 66 millones de dólares.

“Tenía claro que quería volver y que iba a hacer todo lo que estuviera a mi alcance para que funcionara y estuviera de vuelta con los Dodgers”, dijo Hernández.

Jugó la temporada pasada con un contrato de un año por 23,5 millones de dólares y demostró su valor al convertirse en un All-Star y ganar el Home Run Derby junto con su tercer Bate de Plata de su carrera, lo que le valió un bono de un millón de dólares. Lo coronó todo al ayudar a los Dodgers a vencer a los Yankees de Nueva York en la Serie Mundial.

Hernández dijo que tenía ofertas de otros equipos que le habrían proporcionado entre 5 y 6 millones de dólares adicionales.

“Para mí, el dinero no era un problema”, dijo.

El acuerdo de Hernández incluye un bono por firmar de 23 millones de dólares. Los Dodgers tienen una opción de club de 15 millones de dólares para 2028 con una rescisión de 6,5 millones de dólares. El contrato también incluye 23,5 millones de dólares en dinero diferido.

Dijo que los Dodgers son “diferentes” a otros equipos.

“Me dan confianza. Realmente no la recibí en otros lugares”, dijo Hernández. “Confían en mí en todo lo que puedo darles. Esa fue una de las cosas más importantes para mí, que me impulsó a hacer el mejor trabajo que puedo hacer con el uniforme de los Dodgers”.

El mánager Dave Roberts dio la bienvenida al regreso de Hernández.

“No se trata solo de conseguir a los jugadores más talentosos. Tienes que ser bueno en el campo y tienes que jugar el juego de cierta manera”, dijo. “Lo que hace eso es mejorar a la gente que te rodea, hace que los compañeros de equipo se responsabilicen. Para nosotros, Teo cumplió con todos los requisitos”.

Hernández conectó 33 jonrones, la mayor cantidad de su carrera, y remolcó 99 carreras la temporada pasada. El jugador de 32 años bateó .272 en 154 juegos.

“Siempre puso al equipo primero y se podía ver que había un verdadero amor por el juego que traía al campo todos los días”, dijo el gerente general Brandon Gomes. “Creo que debido a la forma en que juega con tanta pasión y alegría, cuando surgieron esos grandes momentos, fue algo que realmente apreció y pudo poner al equipo primero y bajar el ritmo cardíaco y hacer lo que fuera necesario en esa situación”.

Hernández estará en el jardín derecho y Mookie Betts regresará al campo corto. El recién llegado Michael Conforto estará en el izquierdo.

Hernández fue acogido por los fanáticos de los Dodgers y su apoyo no pasó desapercibido.

“Aprecio que desde el primer día que llegué aquí los fanáticos de los Dodgers me hayan aplaudido”, dijo. “Me dieron el apoyo que necesitaba para tener la temporada que tuve el año pasado. Cuando tienes ese apoyo como jugador, tienes que dar el 110 por ciento todos los días”.