El dominicano dice que ya es hora de pasar la página y de aceptar que ese tema está en el pasado
Rafael Devers, la superestrella de los Medias Rojas de Boston, parece estar cansado de las preguntas recurrentes sobre su posición en el campo y la llegada de Alex Bregman.
¡Se molestó! Rafael Devers humilla a periodista que le pregunta por Alex Bregman
Durante una reciente entrevista en el inicio de la temporada 2025, “Carita”, como se le conoce al antesalista dominicano de 28 años, expresó su frustración con claridad.
Según reportes, Devers le dijo a un periodista: “Ya eso pasó (3B). Fue algo que pasó en el #SpringTraining y ustedes siguen con la misma pregunta.
Ya empezó la temporada y ven donde estoy jugando (DH). Vamos a cambiar el tema y tienen que buscar otro tipo de contenido”.
Estas declaraciones marcan el segundo encontronazo de Devers con la prensa en lo que va del año, aunque esta vez no involucró al conocido cronista Franklin Mirabal, quien previamente lo había criticado con dureza.
El conflicto tuvo sus raíces en febrero, cuando Devers afirmó tajantemente: “Mi posición es la tercera base. Es lo que he jugado. No sé cuáles son sus planes”.
Estas palabras desataron un revuelo, especialmente tras el fichaje de Alex Bregman, un tercera base con un Guante de Oro.
Mirabal, narrador de los Tigres del Licey y editor del periódico HOY, arremetió contra Devers en redes sociales, comparándolo con leyendas que aceptaron cambiar de posición por el equipo.
Sin embargo, el manager Alex Cora puso fin al debate al anunciar que Bregman ocuparía la tercera base y Devers sería el bateador designado, una decisión que el dominicano terminó aceptando, aunque no sin cierta resistencia inicial.
Con la temporada 2025 en curso, Devers enfrenta un nuevo escrutinio. En los primeros juegos, lleva un récord de 8-0 (ocho turnos sin hits), un arranque lento que ha alimentado especulaciones.
Algunos aficionados y analistas sugieren que su bajo rendimiento podría estar vinculado a la transición al rol de bateador designado y la pérdida de su posición habitual en el campo.
Aunque Devers no ha abordado directamente estas teorías, sus declaraciones reflejan un deseo de dejar atrás la controversia y enfocarse en el presente.
Este segundo roce con la prensa subraya la presión sobre Devers, una pieza clave para Boston tras su extensión de 10 años y $313 millones.
Mientras los Red Sox buscan consolidarse como contendientes, la pregunta es si “Carita” podrá adaptarse y responder con su bate, silenciando las críticas más allá de dónde juegue en el diamante.