Ismael le anuncia a Nicolás que Florencia tiene siete semanas de embarazo, él le pide que se cerciore si en verdad es su hijo ya que ella pudo haberse metido con otro hombre.

Ismael le revela a Nicolás que Florencia está embarazada de siete semanas. Esta noticia sorprende a Nicolás, quien, preocupado por la situación, le pide a Ismael que verifique si realmente el bebé es suyo. Nicolás desconfía y teme que Florencia haya tenido una relación con otro hombre, lo que podría poner en duda la paternidad.

Esta incertidumbre genera tensión entre los personajes, ya que Nicolás se enfrenta a la posibilidad de que su relación con Florencia no sea tan sólida como pensaba. La situación se complica y plantea preguntas sobre la confianza y la lealtad entre ellos.