Ellas suben una marcha

Las nuevas oportunidades en el automovislismo femenino impulsan a futuras generaciones, que tienen más visibilidad y apoyos. ¿Es el momento de dar el ‘acelerón’ final hacia la F1? Marta García y Nerea Martí cuentan cómo lo viven en este Reportaje MARCA

Ellas suben una marcha

POL HERMOSO

Cada vez más cerca. El automovilismo históricamente ha sido una industria con más representación masculina, pero estamos en un momento crucial para su futuro. Un momento de cambios. Lo que hace pocos años parecía un sueño lejano, hoy empieza a tomar forma y las mujeres están más cerca que nunca de volver a las categorías más altas, derribando barreras, como quiere también Liberty, nuevo patrón de la F1.

En fórmulas es muy difícil aún ver a mujeres en la élite. Esto viene de muy atrás en el tiempo, donde las oportunidades que tenían las deportistas en el motorsport eran muy inferiores a las que tenían los pilotos masculinos, lo que acababa provocando que pocas mujeres pensaran en que se podían dedicar realmente al motor y hubiera pocos referentes.

Gracias a iniciativas de inclusión, como los test exclusivos para pilotos femeninas en Fórmula E, que se disputaron hace pocos días en el Jarama, y el impulso de la F1 Academy, las pilotos están mostrando que el talento no tiene género. Esta nueva generación de mujeres al volante, liderada por nombres como Marta García, Nerea Martí en España y otras como Jamie Chadwick, que tiene cierta participación en la Indycar y parece ser la mujer que ahora está más cerca de llegar a la élite, representa una señal de que el cambio ya ha comenzado y es inevitable.

“Las mujeres ya están aquí”: más visibilidad y apoyo

Marta García fue la primera campeona del mundo de la F1 Academy y tras un último año compitiendo en la Fórmula Regional Europea y en competiciones como la Ligier European Series reconoce esta metamorfosis en el automovilismo actual en comparación con cuando ella comenzó. “Hace años las cosas no eran igual que ahora”, afirma.

Antes, las cosas no eran igual que ahora, pero hemos abierto camino para que en un futuro sea más fácil

Marta García

Para ella, la visibilidad y los programas de apoyo han avanzado enormemente, con iniciativas como la FIA Women in Motorsport o la F1 Academy, que antes simplemente no existían. “Yo creo que al menos nosotras hemos abierto caminos para que todo esto pase”, añade con orgullo. Todas estas nuevas puertas que se abren llegan tarde, pero han llegado para quedarse y pueden ser el acelerón final hacia la F1.

“Iniciativas como la F1 Academy permite que se nos vea, y que las niñas pequeñas que están en su casa puedan ver que hay pilotos femeninas compitiendo, que no sólo son hombres los que corren en la Fórmula 1”, destaca García. Contar con referentes visibles es fundamental y estas mujeres que hoy tratan de tumbar las puertas de las grandes categorías no tuvieron ese espejo donde mirarse y en su caso “de pequeña no tenía ninguna referente, y si no tienes referentes también es un poco más complicado meterte en el mundo”.

Iniciativas como la F1 Academy permite que se nos vea, y que las niñas pequeñas que están en su casa puedan ver que hay pilotos femeninas compitiendo, que no sólo son hombres los que corren en la Fórmula 1

Marta García

Y la F1 Academy es clave para que se puedan dar a conocer, una oportunidad que antes no tenían. “Me ha dado muchísima visibilidad. Los equipos de F1 se han involucrado una barbaridad”, explica Nerea. Pero a pesar de los avances, se enfrentan a problemas no sólo en la pista, sino también a nivel de recursos y oportunidades para progresar en categorías de renombre.

A pesar de los avances, las barreras persisten. Nerea confiesa la dura realidad que vive. “No seguiré en Fórmulas, no tengo presupuesto para lo que requiere. No tengo un millón y medio de euros”, explica. El dinero es un problema que comparten hombres y mujeres en el ‘motorsport’, en un mundo donde el dinero manda, pero que en su caso es más complicado, porque que están apenas ganando reconocimiento.

Sólo las míticas Danica Patrick y Pippa Mann en Indycar rompieron moldes. Allí coquetea ya en NXT, Jamie Chadwick, punta de lanza de esta nueva generación y tricampeona de las Women Series, hoy sustituídas por la F1 Academy. Pero como Hailie Deegan en Nascar, o en su momento Simona de Silvestro en la Fórmula E, están en el segundo peldaño.

Un camino más accesible, pero aún con desafíos

“Hubiese sido mejor que las oportunidades hubiesen llegado cuando tenía 16 años, que es cuando puedes crecer como piloto de monoplazas” reflexiona Marta, que a sus 24 años, tras una mala temporada en una categoría con todo hombres (FRECA), también se ve obligada a abandonar los fórmulas. De hecho, es fundamental según la valenciana “que se den estas oportunidades más a menudo, para coger experiencia, conocer más el coche, conocer más los ingenieros, y tener la oportunidad de demostrar”, afirma sobre iniciativas como los test de mujeres.

La próxima generación, la definitiva

Las nuevas generaciones son optimistas y ambiciosas. Aunque aún queda camino para ver mujeres en la Fórmula 1, estas pilotos saben que están sentando las bases para que esto sea posible. Para Marta, la preparación física y el talento de las mujeres en la pista están al nivel de cualquier piloto masculino en categorías como la Fórmula Regional, aunque señala que también hay “factores externos” que pueden hacer que competir a alto nivel sea un reto constante.

Nerea, por su parte, no se corta: “Aún no hay ninguna chica preparada para la F1”. Aún así subraya que el proceso llevará tiempo, pero que las niñas que hoy están comenzando a entrenar en karting ya tienen un horizonte más claro. “Las chicas que ahora estén entrenando con 12 años y sigan ese mismo programa son las que van a estar en la Fórmula 1“, afirma. Y es que viendo que ya son muchas las chicas que empiezan en el karting, por pura estadística será más fácil que en un futuro puedan llegar.

Aún no hay ninguna chica preparada para la F1, pero las niñas que ahora estén entrenando con 12 años y sigan ese mismo programa son las que estarán en la F1

Nerea Martí

El camino hacia la inclusión total en el automovilismo está trazado, y es una realidad que las mujeres ya están dejando una marca imborrable en él. Marta García, Nerea Martí representan a una generación decidida a competir con cualquier piloto, en cualquier circuito, y a preparar un terreno más fértil para que las siguientes generaciones puedan acceder a las categorías élite sin las barreras que ellas encontraron.

Entonces, ¿ellas suben la marcha? La respuesta es sí, porque el talento y la perseverancia están rompiendo moldes y su impulso allana el camino para que las futuras generaciones lleguen aún más lejos.