Castro le presenta al juez la prueba con la que demuestra que Vicente no pudo atacar al barman ya que se sometió a una cirugía de la mano derecha que le impide tener la fuerza para romper una botella en otra persona.

Castro presenta al juez una prueba contundente que demuestra que Vicente no pudo haber atacado al barman. La evidencia consiste en que Vicente se sometió a una cirugía en la mano derecha, lo que le impide tener la fuerza necesaria para romper una botella sobre otra persona. Esto respalda la defensa de Vicente y sugiere que no es capaz de llevar a cabo el acto del que se le acusa.