Fernando Valenzuela, conocido como ‘El Toro’, se ha convertido en un ícono histórico de los Dodgers y el béisbol mexicano, especialmente durante la década de los ochenta, un periodo apodado ‘Fernandomanía’.

Nacido el 1 de noviembre de 1960 en el pequeño pueblo de Etchohuaquila, Sonora, Valenzuela fue el menor de doce hermanos y comenzó a jugar béisbol a los 13 años. A los 18, atrajo la atención de Mike Brito, un cazatalentos de los Dodgers, sin imaginar que se estaba descubriendo una leyenda del deporte.

La gran llegada de Valenzuela a las Grandes Ligas se produjo el 9 de abril de 1981, cuando debutó como pitcher titular en el partido inaugural de Los Angeles Dodgers. Ese año marcó su trayectoria de ensueño, al ser nombrado novato del año y ganar el trofeo Cy Young, culminando con un campeonato en la Serie Mundial frente a los New York Yankees. Este éxito desató la ‘Fernandomanía’, un fenómeno que resonó tanto en México como en Estados Unidos.

Valenzuela no solo brilló en el campo, sino que también se convirtió en un referente para la comunidad mexicana en el extranjero, que se sintió representada por sus triunfos. Junto a otros ídolos deportivos como Hugo Sánchez y Julio César Chávez, ‘El Toro’ lideró una ola de éxito que unió a fanáticos en ambos lados del Río Bravo. Durante sus 11 temporadas con los Dodgers, ganó dos Series Mundiales y fue seleccionado en seis ocasiones para el All-Star Game.

En reconocimiento a su legado, el Ayuntamiento de Los Ángeles proclamó el 11 de agosto como el ‘Día de Fernando Valenzuela’ y en 2023, los Dodgers retiraron su número 34, que él llevó con orgullo. Tras dejar el equipo angelino, Valenzuela continuó su carrera en las Grandes Ligas hasta 1997, convirtiéndose en un embajador de la cultura mexicana en el deporte y demostrando que, incluso sin las redes sociales, su impacto fue innegable.