La salida del director técnico de Aston Martin anticipa la era Newey que se abre en 2025

Aston Martin se ‘carga’ a Dan Fallows

La noticia del cese de Dan Fallows en su cargo de director técnico de Aston Martin F1 tiene mucha repercusión, pero dentro del ‘paddock’ no ha sido algo sorprendente. Ya desde la pasada primavera, cuando se vio que el AMR24 no estaba con los mejores equipos se señalaba al ingeniero británico en el punto de mira, según muchos analistas. El transcurso de la temporada no ha hecho sino apuntalar la idea de que podría ser sacrificado. Estas son las principales razones para su salida a un puesto menor dentro del equipo, que seguramente no esté relacionado directamente con la competición.

Ausencia de mejoras reales

O al menos de seguir el ritmo de evolución, no sólo de los mejores equipos, sino de otros como Haas, Williams o Visa RB, escuadras con menos recursos y presupuesto que los de Aston. Las mejoras han sido muy pocas y se estima que desde Bahréin, Aston ha perdido 0,4 segundos (por vuelta) en su ritmo de carrera respecto a la referencia de McLaren, el que más ha cedido en esa medición que realiza la F1

Sólo una evolución efectiva

Tres han sido los grandes paquetes de piezas con búsqueda de mejora de puntos de carga aerodinámica y rendimiento en el fondo del coche, pieza clave en esta generación de coches de efecto suelo. En Imola (mayo) fue un desastre y el coche pasó de ser uno de los mejores a una vuelta a un ‘hierro’ inconducible.

En Hungría (julio) llegó la que estaba señalada por Fernando Alonso como “el inicio de una temporada nueva”, Al menos eso es lo que a él le dijeron en su momento, pues llegaba un nuevo suelo en apariencia calcado del de McLaren en Miami, con el que los de Woking se convirtieron en el mejor equipo de la parrilla. En Budapest y en carreras posteriores se notó una mejoría, con Alonso en la Q3 (con algún sexto) y en los puntos de forma consistente, pero sin ese ansiado salto de calidad que se esperaba.

En Austin (octubre), ya sin pregonar casi nada desde dentro y con mucha cautela, llegó el último gran paquete evolutivo, pero los resultados han sido peores de lo esperado y peores que en 2023. Penúltimo equipo en ritmo y sólo Fernando en la Q3 en Brasil, donde hasta que llegó la lluvia fuerte peleaba por los puntos con coches superiores.

Lawrence Stroll y su exigencia

Un empresario de gran éxito, como el actual propietario de la marca exige rendimiento y cuentas y Fallows, como cabeza visible no los ha podido ofrecer en el desarrollo del coche durante dos años. Era un movimiento que se esperaba hace tiempo.

La llegada de Adrian Newey

El periodo de ‘gardening’ que es el año que un ingeniero debe permanecer en blanco antes de trabajar para su nuevo equipo. Acabará para Newey el 2 de marzo de 2025. Esto es así para proteger los secretos industriales del equipo saliente en su labor de diseño fabricación de piezas… Pero es que Adrian también ha asumido un rol como consultor y socio capitalista en Aston Martin, por lo que muy posiblemente su opinión ha sido tenida en muy cuenta.

Posible factura pendiente

No hay que olvidar que Fallows fue segundo en el departamento de aerodinámica de Red Bull, bajo el mando de Newey hasta 2021 y que en 2023 asumió el reto de marcharse en solitario a Aston para ser el director del nuevo equipo. Siempre se habló de que usó información sensible de Milton Keynes, sobre todo por frases como las de Helmut Marko en Bahrein 2023: “Hemos visto a tres Red Bull en el podio”, dijo sobre Fernando al lado de Verstappen y Checo.

Lo que también se ha dicho es que la relación entre Fallows y Newey no era la mejor desde su salida inesperada y que la confianza entre ambos se había roto desde entonces.

El AMR25, en nuevas manos

Relacionado con lo anterior y en un periodo en el que el coche de 2025 va tomando forma, se ha retirado a Fallows de la cabeza del proyecto. El coche será fabricado por el mismo equipo de trabajo, pues eso es imposible de cambiar, pero abierto al asesoramiento de nuevas personas.

En marzo Newey y su nueva gente (se dice que llegará con 10 ó 15 personas de confianza) sí podrán tomar el mando de la evolución del próximo monoplaza y eso debería notarse en una línea ascendente a lo largo del año en el coche de Alonso y Stroll, preparando el cambio de chasis, aero y motor que llegará en 2026 con una nueva generación de F1 que se espera revolucionaria.